El significado de la frase es: “No consideren a los días como sus enemigos que ellos serán sus enemigos”.
Esta frase se encuentra en algunos de los hadices del gran Profeta (s.a.w.) y el propósito de “los días” son los días de la semana.
Esta explicación muestra la importancia del tiempo, y que los días no deberán ser considerados de mal augurio ni deberán quejarse de estos, de lo contrario es posible que la mala predicción que se hizo le suceda. Sino que hay que considerar las brisas de benevolencia que le son destinadas al ser humano en esos días y no olvidar aprovecharlas. En efecto, esta frase puede tener también otro significado el cual indicaremos en la respuesta detallada.
Esta frase se encuentra en algunos de los hadices del gran Profeta (s.a.w.).[1] El significado de la frase es: “No consideren a los días como sus enemigos que ellos serán enemigos”.
Lo aparente de esta explicación muestra que el ser humano no debe enemistar con los días de la semana y quejarse de ellos considerándolos de mal augurio, ya que es posible que una predicción así pueda traer un mal destino, un mal resultado y le ocurra aquel suceso que supuso de los días el cual manifestó en forma de queja.
Claro está en algunas narraciones se han presentado también otros significados que pueden ser aceptados como una obligación y comparación en uno de los ejemplos o como el significado interno de estas palabras. Estas palabras fueron dichas respecto a los nombres dados a los días de la semana, puesto que cada día es en nombre de uno de los Inmaculados Imames (a.s.) y el propósito de “los días” son los días de la semana.[2]
Saqar Ibn Abi Dulfa, uno de los shías del Imam (a.s.) sostenía la creencia que el propósito de “los días” en esa frase de la narración era el día y la noche, y que esta narración era testigo de las creencias de los astrónomos y adivinos que el destino del ser humano depende de la secuencia del día y la noche, de la luna y de las estrellas, y consideraban al ser humano entregado ante ésta. Saqar Ibn Abi Dulfa dijo: “Fui a visitar al Imam Hadî (a.s.) cuando se encontraba encarcelado. Le dije “¡Mi señor! Existe una narración del Profeta (s.a.w.) de la cual no entiendo su significado”. El Imam Hadî (a.s.) dijo: “El significado de “los días” somos nosotros, mientras los cielos y la tierra existan y estén en acción. Entonces el sábado es en nombre del Mensajero de Dios, y el domingo es en nombre del Imam ‘Alî (a.s.), el lunes en nombre del Imam Hasan y del Imam Husayn (a.s.), el martes en nombre de ‘Alî Ibn Al-Husayn (Imam Saÿÿâd a.s.) de Muhammad Ibn ‘Alî (Imam Bâqir a.s.) y de Ÿa’far Ibn Muhammad (Imam Sâdiq a.s.), el miércoles en nombre de Musâ Ibn Ÿa’far (Imam Musâ Kadzim a.s.) de ‘Alî Ibn Musâ (Imam Ridâ a.s.) de Muhammad Ibn ‘Alî (Imam Ÿawâd a.s.) y mío (el Imam Hâdî a.s.), el jueves en nombre de mi hijo Hasan (Imam Hasan Askarî a.s.) y el viernes en nombre del hijo de mi hijo (es decir su nieto, el Imam de la Época a.ÿ.)”.[3]
Esta explicación muestra la importancia del tiempo, y que los días no deberán ser considerados de mal augurio ni deberán quejarse de estos, sino que hay que considerar las brisas de benevolencia que le son destinadas al ser humano en esos días y no olvidar aprovecharlas.
Uno de estos beneficios y atracción del favor Divino, es pedir ayuda a los Inmaculados Imames (a.s.) a través de salutaciones que fueron mencionadas según la denominación de los días en las obras de súplicas tales como Las Llaves del Paraíso (Mafâtih Al-Ÿinân).