Para iniciar es necesario recordar este punto que la semejanza principal entre la religión del Islam y demás religiones celestiales no alteradas, es establecer el monoteísmo y la adoración de Dios sobre la Tierra, así como libertar a la gente del servicio y de la adoración a cualquiera fuera de Dios. Tal y como el Generoso Corán dijo: “Ciertamente, Nosotros enviamos a cada comunidad un Mensajero: ¡Adorad a Dios y abandonad los ídolos!”[1] Si consideramos esta semejanza existente en los Profetas, incluso la religión cristiana y la judía con la invitación de los Profetas tales como Jesús (a.s.) y Moisés (a.s.) al monoteísmo y a la adoración de Uno sólo, sobre esos mismos fundamentos Divinos primarios de sí mismos que estuvieron lejos de cualquier alteración, estas religiones cuentan con preferencias sobre las demás sectas y escuelas irreligiosas. Aunque en la época actual algunos de los cristianos y judíos no consideraron los fundamentos primarios de su religión en tal forma que alteraron la Tora y los Evangelios. Por ello en muchos casos tal vez sean considerados como escuelas irreligiosas.

Pero entre las religiones Divinas, la religión del Islam posee una universalidad que sus enseñanzas comprenden todas las dignidades individuales y sociales para llegar a alcanzar la felicidad. La universalidad de la religión del Islam es muestra de la amplitud y extensión de sus dominios. La universalidad de la religión del Islam, va acompañada del propósito de su descenso por parte de Dios Sublime, y el propósito del descenso de la religión también es ese mismo propósito de la creación del ser humano, puesto que Dios Sublime que creó al ser humano con un propósito deberá anunciar a éste también los mandatos, las instrucciones y los conocimientos necesarios para alcanzar ese propósito. Dios Sublime envió este programa en los diversos tiempos según la necesidad de los seres humanos y la dignidad de estos, y todos estos programas fueron traídos a través del Profeta Muhammad (s.a.w.) y sus sucesores para la humanidad bajo el nombre de “Islam”.[2]

Entonces a pesar de que la escuela y la religión del Islam tienen superioridad y universalidad sobre las demás religiones Divinas, pero en forma general las escuelas y las religiones Divinas tienen preferencias y normas fundamentales sobre las escuelas y sectas irreligiosas que no siguen ninguno de los fundamentos ni métodos de las religiones celestiales auténticas y se encuentran lejos de cualquier alteración, tales como el liberalismo. A continuación (en forma general) indicamos parte de estas preferencias y diferencias.

A) Preferencias y diferencia en los propósitos

Las escuelas y los sistemas que los fundamentos y los métodos de la vida de éstas no se basan en la religión, toda su atención la consideran sólo y exclusivamente del “mundo” y del “antropocentrismo”. Explicado en otras palabras, el propósito más fundamental de ellas es sólo preparar las necesidades mundanales de la sociedad y del ser humano, sin considerar un propósito más elevado que esto.[3] Pero el sistema religioso sigue dos propósitos: uno proveer las necesidades y llegar a la felicidad de este mundo y, el otro, proveer bondades y felicidades de la vida eterna.

Los propósitos más importantes de la escuela y de la religión del Islam corresponden a:

Uno. Establecer el monoteísmo y la adoración de Dios sobre la Tierra así como libertar a la gente del servicio y de la adoración a cualquiera fuera de Dios, que fue mencionado con anterioridad.

Dos. Establecer una sociedad ejemplar y una ciudad ideal a través de la realización de la justicia y equidad islámica: “Ciertamente, enviamos a Nuestros Mensajeros con las pruebas claras e hicimos descender con ellos la Escritura (Celestial) y la Balanza (distinguir la verdad de la falsedad, y las leyes justas) para que los humanos establezcan la justicia”.[4]

El asunto del establecimiento de la justicia social para crear campos para el desarrollo de las virtudes humanas y llegar a la perfección y al acercamiento a Dios es considerado de los actos especiales de la religión del Islam. Mientras que ninguna de las escuelas no-religiosas ha colocado dentro de su programa el esfuerzo por realizar un campo de desarrollo y sublimidad de las elevadas virtudes humanas ni para crear campos adecuados para la felicidad del mundo y de la otra vida.

Tres. Despertar el innato humano y hacer activas las perfecciones espirituales que fueron colocadas como depósito en pasivo dentro del ser humano. Explicado de otra manera, preparación para crear cambios graduales en el ser humano para transitar de “ser” a “estar” o transitar de la situación de pasivo a activo en base a los fundamentos y valores correctos de la religión.

B) Las diferencias en el método y la norma de la bondad y maldad

En los sistemas y las escuelas irreligiosos los métodos y programas de estos y la distinción de lo bueno y lo malo, lo permitido y lo prohibido, generalmente se realiza sin considerar los valores y los fundamentos básicos religiosos y de la revelación. Según lo que ellos sostienen, el intelecto por sí mismo y sin revelación, es poderoso para distinguir lo bueno de lo malo. Esta opinión es conocida como movimiento de “racionalismo extremista”. O algunos de ellos consideran sólo a los sentimientos humanos como la norma para distinguir lo bueno de lo malo. Existe también otra opinión respecto a la norma de la bondad y la maldad.

Esto es seguro que la falta de atención a los valores provoca que el concepto “el fin justifica los medios”, en la práctica se presente en forma de un fundamento dominante pasando por alto los ideales y los fundamentos morales.

Pero en la religión del Islam se ha prohibido el uso de normas y métodos que no armonizan con la moral y con la generosidad Divina del ser humano, que se oponen a los elevados valores morales y destruyen la perfección y la felicidad eterna de la humanidad.[5]

C) La opinión del Islam hacia el ser humano en el campo de la autoformación desde dos aspectos

La religión del Islam en el sendero de la autoformación, la perfección y la felicidad humana, colocó para éste ser humano un punto de vista doble. Luego el triunfo en este sendero lo estableció sobre esto, esta verdad es que el ser humano además del cuerpo posee una vida y una alma superior, y su atención no deberá centrarla sólo y exclusivamente en lo físico, y olvidar su alma.

El Generoso Corán respecto a la creación del ser humano indica las dos especialidades: “Quien ha hecho perfecto todo lo que ha creado y Quien creó inicialmente a los seres humanos de barro”. [6] Entonces “puso su descendencia en la esencia que se extrae de una gota de líquido insignificante” [7] Este es ese mismo aspecto físico de él. A continuación indica el aspecto y la verdad espiritual de éste. Dice: “Luego le dio forma e insufló en él parte de Su Espíritu”.[8]

El alma Divina, es un elemento angelical, honorable e inmortal. Desde la opinión del Islam, este elemento trascendental, después de haberse desintegrado el cuerpo, sigue existiendo, y tendrá la vida eterna y la felicidad, o la infelicidad eterna –según los actos que el hombre realice–. La antropología Divina manifiesta que la perfección del ser humano se muestra bajo los rayos de la perfección espiritual y la adquisición de un atributo superior humano.[9]