Los sabios y juristas religiosos dicen: El líder de la oración colectiva deberá poseer algunas condiciones y especialidades, una de estas condiciones es que el líder de la oración colectiva deberá ser hijo legítimo.[1] Las razones de esta condición se mencionan a continuación en forma sucinta:

1. Iÿma (consenso unánime de los sabios)[2]: Todos los sabios religiosos shi’ítas dicen: El líder de la oración deberá ser hijo legítimo.[3] O por lo menos sea oculto que es hijo ilegitimo.[4] Entonces es prohibido seguir a alguien que tenemos la seguridad que es un hijo ilegítimo.[5]

2. Precaución: El Shaij Tusi en su obra “Jalâf” considera a la precaución[6] como la segunda condición de que el líder de la oración debe ser un hijo legítimo. Su propósito al decir “precaución” es esa misma ocupación del cargo, es decir, si tenemos la certeza de un dictamen tal y como la obligación de realizar nuestra oración, y dudamos que ese líder sea legítimo ¿termina o no la obligatoriedad de nuestra oración en forma colectiva? Para obtener la certeza y dar fin a la obligación, debemos actuar con precaución respecto al líder ilegítimo, y no imitarlo en la oración.

3. Existen numerosas narraciones que dicen: “Es prohibido seguir en la oración a una persona ilegítima”:

A) Del Imam ‘Alî (a.s.) se transmitió que dijo: “No sigan en la oración a un loco o a un hijo ilegítimo”.[7]

B) Así también este honorable dijo: “Seis grupos carecen de la competencia para ser líderes de la oración: “el hijo ilegítimo, el apóstata, aquel que regresó a la ignorancia después de haber emigrado, el bebedor de licor, aquel que recibió castigo legal y aquel a quien no le hayan hecho la circuncisión”.[8]

C) El Imam Bâqir (a.s.) dijo: “Cinco grupos no pueden ser elegidos como líderes de la oración que uno de estos es el hijo ilegítimo”.[9]

Pero respecto a la filosofía de un dictamen así, debemos decir:

(1) El vocablo “imam” significa “líder”, “dirigente” y alguien a quien los demás imitan, y consideran modelo de sus actos.[10] Y el imam o líder de la oración significa también aquel que un grupo lo considera su modelo y lo imita. Por ello el responsable de ese cargo no debe tener ningún defecto, aunque él no haya intervenido en ese defecto. Una explicación a esto es que el significado de algunas narraciones es la prohibición del hijo ilegítimo de algunos de los cargos sociales y espirituales, tal y como el liderazgo de la oración colectiva y el cargo de sabio a imitar y otros[11], y esto es por las especialidades de esos cargos mientras que el significado no es privación de la salvación del día de la Resurrección. Por ejemplo un hombre ciego no puede hacerse responsable de algunos cargos, o la persona olvidadiza no puede ser juez, incluso si durante su vida no ha realizado el más mínimo pecado, y tener una buena memoria es de las condiciones del cargo de juez. Pero estas privaciones no tienen relación con la felicidad o infelicidad (en la otra Vida) de la persona, y así es también la situación de un hijo ilegal. Nuestro testigo es que en esa misma narración el hijo ilegal se encuentra junto al loco, leproso y otros, a pesar de que nadie por propia voluntad se vuelve loco o leproso.

Desde el punto de vista social la ilegitimidad del hijo también es considerada un tipo de defecto y carece de reputación puesto que, por una parte, el hijo ilegal es el producto de un acto ignominioso y, por otra, durante lo largo de la historia los hijos ilegítimos no tuvieron una boleta aceptable, y esto es evidente que en algunos cargos la persona debe, en cuanto a las responsabilidades, encontrarse lejos de las especialidades y de los atributos que provocan odio y alejamiento de la gente, aunque esas especialidades le hayan sido impuestas.

Si se dice ¿pero él no realizó pecado alguno?

Se responderá que, el sistema del universo fue diseñado sobre las causas y los efectos. Aquel que pierde la vista sin duda los factores hereditarios o ambientales u otros influyeron en ese defecto, que en la mayoría de los casos se encuentran fuera de su voluntad.

Numerosos factores influyen en el defecto o en la perfección del hijo, asunto debatido en los libros correspondientes, y en el Islam también fueron dadas innumerables ordenes para evitar estos defectos y dificultades, que por ejemplo cuál debe ser el momento y el lugar para concebir, qué alimentos debe ingerir la madre durante el embarazo y…

En una narración del Imam Sâdiq (a.s.) dice:

«الْمِمْرَازُ لَا یَطِیبُ إِلَی سَبْعَةِ آبَاءٍ وَ قِیلَ لَهُ وَ أَیُّ شَیْ‏ءٍ الْمِمْرَازُ فَقَالَ الرَّجُلُ یَکْتَسِبُ مَالًا مِنْ غَیْرِ حِلِّه»

“El mimraz no se purifica hasta después de 7 generaciones”. Preguntaron: “¿Qué es mimraz?” El Imam respondió: “El hijo producto de bienes prohibidos”.[12]

Respecto a los efectos del alimento prohibido en el ánimo de la persona fueron mencionadas narraciones y numerosos sucesos en las obras de hadices e históricas que entre éstas es interesante la historia de Sharîk Ibn ‘Abdul.lah Nafa’î.[13]

Claro está deberá ponerse atención en que nada de lo mencionado puede ser una causa completa, es decir, no es así que el sendero esté obstruido y para el hijo ilegítimo no exista las posibilidades de la salvación, que si fuese así no tendrían significado las obligaciones para él, mientras que el hijo ilegítimo está obligado ante los fundamentos y las ramas de la religión. Sino que lo que dijimos que los factores ambientales, hereditarios y demás factores pueden tener grandes efectos en la elección de una conducta especial. Pero al mismo tiempo no obliga al ser humano a realizar un acto especial, y este ser humano en todos los niveles de su vida puede predominar en los factores hereditarios y ambientales, y colocarse en el sendero correcto, por ello es que su obediencia es recompensada, y su desobediencia castigada.[14]

(2) En realidad este tipo de mandatos y también las narraciones que[15] mencionan lo malo del hijo ilegítimo es una lucha multilateral en contra del acto de la fornicación, es la explicación y muestra para todos de la fealdad del acto de la fornicación en la sociedad, y así terminar con las raíces de este pecado.